Para marcar la subida al trono del nuevo emperador de Japón, el gobierno ha declarado un período de vacaciones sin precedentes de 10 días, preocupando a los inversionistas, quienes dicen que un cierre del mercado podría causar interrupciones y perturbar el yen.
Este año, cuando el príncipe heredero Naruhito sea coronado como el nuevo emperador el 1 de mayo, el gobierno decidió hacer el período del 27 de abril al 6 de mayo la festividad más larga en la historia del país.
El organismo de control financiero de Japón les ha dicho a todas las instituciones financieras que alerten a los clientes sobre la posibilidad de turbulencias en los mercados extranjeros durante el cierre, y que se aseguren de que sus sistemas puedan hacer frente a una gran cantidad de actividad antes y después, según datos de la agencia Reuters.
El feriado también podría interrumpir el comercio de divisas. Los especuladores con una visión alcista sobre el yen podrían aprovechar las largas vacaciones para subir el yen.
La fluctuación de la moneda podría afectar los negocios entre Ecuador y Japón, llevando a una disminución de importaciones.
Fuente: The Asahi Shimbun
Elaborado por: OCE Tokio
