A comienzos de 2025, Estados Unidos experimentó un repunte en la importación de camarones, lo que refleja una recuperación del mercado después de la volatilidad de 2024. La demanda continúa siendo fuerte, sobre todo entre los consumidores más jóvenes y flexitarianos, pero se ve limitada por factores como el precio y la preparación del producto. Las estrategias para mejorar el consumo doméstico incluyen ofrecer productos más convenientes y accesibles.
En China, aunque las importaciones de camarones han disminuido, la demanda sigue siendo relevante, especialmente en áreas más ricas como Pekín y Shanghái. Este descenso se debe principalmente a la mayor producción interna y la variabilidad en los precios, que aumentaron debido a una oferta más restringida. En Europa, la preferencia por camarones orgánicos, procesados y fáciles de preparar sigue en crecimiento, impulsando la demanda de productos convenientes que se ajusten a un estilo de vida más dinámico.
Fuente: Fish Information & Services
Reportado por: Dirección de Promoción de Exportaciones, UIN
